Gupis no domésticos (Micropoecilia & Acanthophacelus): esas diminutas joyas del acuario
Cuando en acuariofilia se habla de gupis, todo el mundo tiene una idea clara del pez al que nos estamos refiriendo. En la mente del más novel y en la del experimentado acuarista aparece la imagen de un vivíparo cuyos machos presentan un cuerpo y aletas multicolores y cuyas hembras, de mayor tamaño, no son tan cromáticamente generosas. El hombre, durante todos estos años de la historia de la acuariofilia, ha ido creando nuevas variedades morfológicas (tipo de aletas) y cromáticas. Es que nos gusta denominar como formas domésticas. Este proceso tan exitoso unido a una demanda siempre pujante, ha hecho que mucha gente desconozca las poblaciones originales, fundadoras de todos los linajes actuales. El gupi o los gupis salvajes son especies que, desde nuestro punto de vista, no tienen nada que envidiar en cuanto a coloración a sus parientes domésticos. Además, en la actualidad, presentan la ventaja, respecto a las formas domésticas, de su significativo tamaño reducido, tan apreciado en nuestros tiempos gracias a los mini-acuarios y a los minipisos.
Las especies que comentaremos más adelante se encuentran clasificados en los géneros o subgéneros (como se prefiera) Acanthophacelus y Micropoecilia, pertenencientes a la subfamilia Poeciliinae y de la tribu Poeciliini, y que serán definidos a continuación.
Los géneros
(Sub)Género Acanthophacelus
Se caracteriza por la siguiente combinación de caracteres: un gancho muy largo y muy recurvado en la punta del gonopodio (quinto radio); más de 10 espinas en el tercer radio del gonopodio; un patrón de coloración con manchas policrómaticas de color blanco, negro, verde, azul, amarillo y rojo en el cuerpo y aleta dorsal y caudal de machos adultos y hembras con ausencia de colores conspícuos excepto en el caso de individuos raros con manchas o líneas negras en la base de la aleta caudal o en el cuerpo.
Durante mucho tiempo se ha considerado un taxón monotípico, Acanthophacelus reticulata. Sin embargo, estudios moleculares han demostrado una fuerte diferenciación genética de las distintas poblaciones. Estas diferencias genéticas, sobretodo entre las poblaciones del Caroni y del Oropuche (norte de Trinidad), de las poblaciones que se encuentran alrededor de la ciudad de Cumaná (conocido como gupi de Endler) y de las de Venezuela, se interpretaron en su momento como el inicio de un proceso de especiación. En la actualidad hay tres especies descritas: Acanthophacelus obscura, Acanthophacelus reticulata y Acanthophacelus wingei.
Autores: Àngel Cánovas & Marc Puigcerver
(lea el artículo completo en el Número 4 de la revista Rio Negro)